Limpiar la cera de oídos con agua oxigenada

Primicias24.- Aprender a limpiar la cera de los oídos con agua oxigenada es una alternativa al uso de los bastoncillos. Estos últimos están desaconsejados, ya que se relacionan con la irritación del conducto auditivo, un mayor riesgo de infección y lesiones en la zona.

Incluso, dichos elementos empujan la cera al interior del oído y pueden causar tapones que bloquean parcial o totalmente el canal.

¿Cómo deberías hacer esta limpieza, entonces?

Antes que nada, es importante destacar que el cerumen tiene por sí mismo una función relevante en la protección del oído. Se destaca por sus propiedades antifúngicas y antibacterianas que ayudan a reducir el riesgo de infecciones. Además, protege de la entrada de agua y otros agentes externos.

En condiciones normales, el oído tiene un mecanismo de autolimpieza que le permite remover los residuos de cera de forma natural. Aun así, siempre está presente en el canal auditivo, debido a su papel protector. De todos modos, si hay una producción excesiva —o si se acumula de más— hay formas seguras de limpiarla.

El método con gotas con agua oxigenada es uno de los más utilizados para hacer frente a este problema. A diferencia de los hisopos de algodón, no empujan el cerumen hacia el interior, sino que lo reblandecen para facilitar su eliminación.

Respecto a esto, una publicación en National Center for Biotechnology Information informó que el agua oxigenada es uno de los agentes cerumenolíticos más utilizados. Su aplicación en soluciones en gotas permite suavizar y estimular la eliminación natural de la cera, además de tener un ligero efecto antibacteriano.

Sin embargo, debe emplearse con precaución, ya que puede ser perjudicial si hay una lesión previa en el tímpano o si la acumulación de cera no obedece a una producción excesiva. De ser así, el médico será quien determine el mejor abordaje.

Las irrigaciones con partes iguales de agua oxigenada y agua son populares a la hora de limpiar la cera de los oídos. El problema es que su aplicación sin supervisión médica supone riesgos potenciales para la salud del oído. Por eso, su empleo se sugiere solo en entornos clínicos tras una revisión previa.

Ahora bien, en el mercado hay disponibles gotas con agua oxigenada en su composición, mejor conocidas como «peróxido de carbamida». De estas se introducen 5 o 10 gotas, 2 veces al día, durante un máximo 4 jornadas. En este tiempo se espera que la cera se reblandezca y se elimine sin inconvenientes.

En líneas generales, es un tratamiento seguro que permite aprovechar las propiedades del agua oxigenada para mantener el oído limpio y sin obstrucciones. Pese a esto, si hay sospecha de lesiones o infecciones, lo mejor es evitar su uso.