Primicias24.com- Los tres miembros de “La Manada” que cumplían pena en la cárcel de Pamplona abandonaron el recinto penitenciario a las 18:00 horas, después de haber abonado la fianza de 6.000 euros decretada por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra.
José Angel Prenda, Jesús Escudero y Ángel Boza, condenados a 9 años de prisión por un delito de abuso sexual con prevalimiento sobre una joven madrileña durante los Sanfermines de 2016, permanecían en esta prisión, desde que el 9 de julio de 2016 el juez decretó prisión provisional comunicada y sin fianza para ellos y los otros dos miembros del grupo encarcelados en Alcalá Meco.
A su salida del centro, situado a las afueras de Pamplona, les esperaban numerosos medios de comunicación que desde primeras horas de la mañana hacían guardia en las puertas de la cárcel, pero no así ciudadanos, puesto a lo largo del día no ha llegado a una decena las personas que se han acercado hasta allí.
Una hora y media después lo hicieron los otros dos condenados que permanecían en la prisión militar de Alcalá de Henares (Madrid).
Medidas cautelares
Este jueves se hizo pública la decisión de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Navarra, que decretaba la prórroga de la prisión eludible bajo fianza de 6.000 euros para los cinco integrantes de ‘La Manada’.
La decisión de permitir su excarcelación la argumentan, entre otros motivos, en que no existe riesgo de reiteración delictiva por el rechazo social que se han generado en su contra los cinco jóvenes sevillanos
Además de la fianza que ya han depositado, se les imponen también medidas cautelares , como la obligación de comparecer los lunes, miércoles y viernes en el juzgado correspondiente de su localidad de residencia; se les prohíbe entrar en la comunidad de Madrid, donde reside la víctima, al igual que toda comunicación con ella; se les retirará el pasaporte, y se les prohíbe salir del territorio nacional sin autorización judicial.
La decisión de permitir su excarcelación la argumentan, entre otros motivos, en que no existe riesgo de reiteración delictiva por el rechazo social que se han generado en su contra los cinco jóvenes sevillanos. «La repercusión que ha tenido este caso y la presión que ha desatado han alimentado un rechazo social de tal magnitud respecto de los cinco acusados que ello permite cuestionar fundamentalmente ese hipotético riesgo de reiteración delictiva», dice el auto al que ha tenido acceso Vozpópuli.