Primicias24.com- Un millón de independentistas tomaron las calles en Barcelona, con motivo de la Diada, la fiesta «nacional» catalana, en una demostración de fuerza y capacidad de movilización a un año del fallido intento de secesión de España.
En una coreografía ideada por los organizadores, la marea de gente quedó en silencio unos minutos y justo a las 17:14 horas (15:14 GMT) -en conmemoración de la toma de Barcelona en 1714 por las tropas borbónicas que suprimieron la autonomía de la región- estallaron en gritos de «Independencia».
La «ola» de ruido generada en ese momento «derribó» un muro, simbolizando los obstáculos superados hacia un Estado soberano. La manifestación ocupó seis kilómetros de la avenida Diagonal.
«Reclamamos nuestro derecho a ser una Nación, de manera democrática y pacífica», declaró a la AFP Roger Pujol, productor de aceite de oliva de 37 años, reclamando que «se haga efectiva la República» catalana.
Al grito de «libertad para los presos políticos», la manifestación pidió el fin del proceso judicial contra los líderes independentistas presos o fugados del país.
La manifestación fue criticada como sectaria por los no independentistas.
«En un día como hoy, los catalanes deberíamos estar celebrando nuestra fiesta nacional y no solamente una apelación a una independencia que sólo es compartida por menos de la mitad de la población», dijo desde Estrasburgo el ministro español de Exteriores, el catalán y socialista Josep Borrell.