Primicias24.com- Cada 5 de marzo, se rinde homenaje a todos los trabajadores del campo, quienes llevan los productos y alimentos a la mesa de las familias del país. Se celebra el Día del Campesino venezolano.
La efemérides que reconoce la labor del campesino como impulsor y generador de riquezas agrícolas, entró en vigor cuando el presidente de la República, Rómulo Betancourt, realizó la promulgación de la Ley de la Reforma Agraria, en el Campo de Carabobo, el 5 de marzo de 1960.
A partir de allí y luego de 40 años, no se logró un desarrollo agrario significativo, ni se elevó la calidad de vida de la población campesina, como se había estipulado.
Según el Censo Agrícola de 1998, creado por la Oficina Central Estadística e Información (actual Instituto Nacional de Estadísticas), el 5% de los propietarios agrarios acaparaban el 75% de las tierras.
Desde el Gobierno de Hugo Chávez, en 1999, fue impulsada una política de defensa y atención al campesino, así como una guerra contra el latifundio.
Con la firma de la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, el 10 de diciembre de 2001 en Barinas, se democratizó la posesión de los terrenos productivos del país, un paso positivo y muy importante para los campesinos y sus familias.
El artículo 17 de la Declaración sobre los Derechos de los Campesinos y Otras Personas que Trabajan en las Zonas Rurales de la Organización de las naciones Unidas (ONU), aprobada en septiembre de 2028, reza que “los campesinos y otras personas que viven en zonas rurales tienen derecho a la tierra, individual o colectivamente. En especial tienen derecho a acceder a la tierra, las masas de agua, y los bosques, así como a utilizarlos y gestionarlos de manera sostenible para alcanzar un nivel de vida adecuado, tener un lugar en el que vivir con seguridad, paz y dignidad y desarrollar su cultura”.