Muchos de los que estaban en lugar grabaron los hechos y gracias a ello se pudo ver como uno de los activistas vertía un líquido inflamable
Primicias24.com- «¡Una vergüenza para nuestro país!», fue la expresión que usó el presidente de EEUU, Donald Trump al referirse a los ciudadanos que quemaron sin piedad la estatua de un general confederado.
A través de sus redes sociales, Trump, denunció a la Policía de Washington D.C. por no haber hecho «su trabajo» para impedir que este grupo de personas derribara la estatua de un general y pidió la detención «inmediata» de los responsables.
El monumento del general de brigada Albert Pike, primero fue derribado y una vez en el suelo procedieron a prenderle fuego. Muchos de los que estaban en lugar grabaron los hechos y gracias a ello se pudo ver como uno de los activistas vertía un líquido inflamable sobre la estatua en llamas, mientras el resto le aplaudía.
Se trataba del único monumento al aire libre dedicado a un general de los Estados Confederados en la capital estadounidense.