La Flota rusa del Pacífico ha sido puesta en alerta, en estado de máxima preparación de combate, en el marco de una inspección sorpresa anunciada por el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, informa RIA Novosti.
El objetivo principal de la inspección sorpresa pasa por «aumentar la capacidad para hacer frente a la agresión de un enemigo potencial», afirmó el ministro.
Con este fin, la Flota realizará lanzamientos de misiles contra grupos de ataque naval e instalaciones terrestres de un enemigo simulado. Asimismo, se involucrarán aeronaves de largo alcance en tareas de adiestramiento.
«Es necesario practicar formas para prevenir el despliegue de fuerzas enemigas en el área de importacia operativa del océano Pacífico -la parte sur del mar de Ojotsk- y repeler su desembarco en el sur de las islas Kuriles y en la isla de Sajalín», declaró Shoigú en una reunión con la cúpula militar.
La inspección se llevará a cabo en tres etapas, empezando con la puesta en plena disposición combativa de la Flota y los ensayos de las fuerzas de defensa antiaérea y de la aviación, precisó el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, Valeri Guerásimov.
A continuación, la Flota se dirigirá a zonas de entrenamiento de combate y pondrá en práctica sus tareas. También se comprobará la preparación de los submarinos estratégicos para el uso de sus arsenales.