Primicias24.com El candidato reformista Masoud Pezeshkian ganó este sábado la segunda vuelta de las elecciones presidenciales iraníes, imponiéndose al conservador Saeed Jalili con la promesa de tender la mano a Occidente y relajar la aplicación de la ley nacional sobre el velo obligatorio, tras años de sanciones y protestas en la república islámica.
En su campaña, Pezeshkian no prometió cambios radicales en la teocracia chií iraní, y desde hace tiempo considera al líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, árbitro final de todos los asuntos de Estado. Pero incluso los modestos objetivos de Pezeshkian se verán amenazados por un gobierno iraní que sigue en manos de la línea dura, la actual guerra en la Franja de Gaza y el temor de Occidente a que Teherán enriquezca uranio hasta niveles próximos al uso armamentista.
El conteo de votos ofrecido por las autoridades situaba a Pezeshkian como ganador con 16,3 millones de votos frente a los 13,5 millones de Jalili en las elecciones del viernes. En total, el ministerio del Interior de Irán dijo que 30 millones de personas participaron en los comicios, los cuales se llevaron a cabo sin la presencia de observadores con reconocimiento internacional.
Los partidarios de Pezeshkian, cardiocirujano y veterano legislador, salieron a las calles de Teherán y otras ciudades antes del amanecer cuando empezó a incrementarse su ventaja sobre Jalili, un exnegociador del pacto nuclear entre Irán y las potencias mundiales.