Primicias24.- Un día como hoy pero de 1943, se publicó la primera edición de El Principito, obra del escritor y aviador francés Antoine de Saint-Exupéry, quien murió un año después, abatido por un avión alemán en la Segunda Guerra Mundial. El libro cuenta con una serie de dibujos hechos en acuarela por el mismo autor.
El Principito, cuya primera edición fue publicada por la editorial estadounidense Reynal & Hitchcock, es considerado el libro francés más leído y traducido en el mundo. Se calcula que fue traducido a más de doscientos cincuenta idiomas y dialectos, incluyendo al sistema braille. Asimismo, es uno de los libros más vendidos en el mundo con 145 millones de copias y más de un millón de ventas por año.
Debido al éxito del libro se produjeron películas, obras de teatro, documentales y hasta parodias. Compartimos una inteligente parodia: «El Principito y el nativo digital», con el texto de Regina Carrá y el dibujo de Carlos Lavida.
Lea las frases célebres de El Principito:
– “A los mayores les gustan las cifras. Cuando se les habla de un nuevo amigo, jamás preguntan sobre lo esencial del mismo. Nunca se les ocurre preguntar ¿qué tono tiene su voz? ¿qué juegos prefiere? ¿le gusta coleccionar mariposas?, pero en cambio preguntan: ¿Qué edad tiene? ¿Cuántos hermanos? ¿Cuánto pesa? ¿Cuánto gana su padre?” Solamente con estos detalles creen conocerle.”
– “Se debe pedir a cada cual, lo que está a su alcance realizar”.
– “Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante”.
– “No era más que un zorro semejante a cien mil otros. Pero yo le hice mi amigo y ahora es único en el mundo”.
– “Para los vanidosos todos los demás hombres son admiradores”.
– “Me pregunto si las estrellas se iluminan con el fin de que algún día, cada uno pueda encontrar la suya”.
– “Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde; desde las tres yo empezaría a ser feliz”.
– “Es una locura odiar a todas las rosas solo porque una te pinchó. Renunciar a todos tus sueños solo porque uno de ellos no se cumplió”.
– “Caminando en línea recta no puede uno llegar muy lejos”.
– “He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: solo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos”.
– “Es mucho más difícil juzgarse a sí mismo que juzgar a los demás. Si logras juzgarte bien a ti mismo eres un verdadero sabio”.