Primicias24.com El presidente de Bolivia, Luis Arce, afirmó este lunes, cuando se celebran los 15 años del ‘Estado Plurinacional’, que el modelo económico del país está vigente y llamó a profundizarlo pese a las críticas hacia el desempeño económico, entre ellas las del exmandatario Evo Morales (2006-2019).
En su discurso en la Casa de Gobierno, en La Paz, Arce dijo que «no hay ningún agotamiento» del Modelo Económico Social Económico Productivo y que ni mucho menos «se puede afirmar que está en su fase terminal» porque eso es una «construcción mediática» que contrasta con la realidad.
El gobernante consideró «legítimo» denunciar que algunas personas «por afanes empresariales e individuales quieren instalar en base a la repetición de mentiras y ninguna cifra la idea de crisis en la economía» y que además hablan de un «supuesto agotamiento» del Estado Plurinacional.
El jefe de Estado boliviano remarcó que esos «ataques no solo vienen de la oposición política derechista tradicional».
Arce insistió en que hay un «movimiento económico que es evidente» y que confirma la «plena vigencia» del modelo boliviano.
El mandatario hizo énfasis en el crecimiento económico de 2,3 % hasta el tercer trimestre del año pasado, la inflación controlada de 2,1 %, también en 2023.
Asimismo señaló que el modelo económico del país fue capaz de soportar las «peores crisis» como la pandemia y los efectos de las guerras en Europa y Oriente Medio, puesto que «sigue demostrando vitalidad», por lo que ahora queda su «profundización» a través de la «inversión productiva».
«No aplicamos recetas neoliberales ni menos electoralistas fáciles. Nuestro Gobierno no reduce salarios, ni recorta la inversión pública, ni privatiza nuestras empresas y recursos naturales ni levanta la subvención a los hidrocarburos», remarcó.
Arce dijo que con la política de su Gobierno de industrialización y sustitución de importaciones busca «reducir la dependencia de los productos extranjeros en al menos 1.300 millones de dólares anuales».
También remarcó que su Administración «nunca» retirará el subsidio a los combustibles como la gasolina y el diésel, que para este año está presupuestado en unos 1.400 millones de dólares, ya que debe entenderse como una forma de «redistribución de los recursos».
El presidente dijo que «lo más difícil es producir» y apostó a la construcción de dos plantas de biodiésel y otras de combustibles ecológicos con otras tecnologías como «soluciones concretas» a un problema estructural».