Primicias24.com.- El papa Francisco expresó preocupación por la nueva ley ucraniana que allana el camino a la prohibición de la canónica Iglesia ortodoxa ucraniana afiliada al Patriarcado de Moscú, recalcando que ninguna iglesia puede ser suprimida.
«Que a los que quieran rezar se les permita rezar en la que consideren su Iglesia. Por favor, que ninguna Iglesia cristiana sea abolida directa o indirectamente: las Iglesias no se tocan», subrayó el pontífice romano.
Después de rezar la oración mariana del Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano, el papa indicó que teme por «la libertad de los que rezan» en vista de «las leyes recientemente adoptadas en Ucrania».
El 20 de agosto, la Rada Suprema aprobó un proyecto de ley que permite prohibir en Ucrania la canónica Iglesia ortodoxa ucraniana afiliada al Patriarcado de Moscú. La entidad religiosa afirmó que la ley viola la Constitución de Ucrania y la Convención Europea de Derechos Humanos. Su abogado, Robert Amsterdam, calificó la resolución del Parlamento ucraniano como «una purga».
Las autoridades ucranianas llevan años acosando a la Iglesia ortodoxa ucraniana vinculada al Patriarcado de Moscú, la comunidad cristiana más grande y antigua del país. La campaña de hostigamiento se intensificó en 2022, tras el comienzo de la operación militar especial de Rusia en Ucrania.
El Gobierno impone sanciones contra eclesiásticos, organiza redadas en templos cristianos, realiza arrestos de sacerdotes, arma casos penales, prohíbe las actividades de la Iglesia ortodoxa ucraniana en diversas regiones y la despoja de monasterios y templos, incluyendo el famoso Monasterio de las Cuevas.