Primicias24.com A dos días del partido contra Países Bajos, este viernes en Leipzig, y casi dos jornadas después de la fractura de nariz sufrida el pasado lunes contra Austria, sigue en duda la participación del francés Kylian Mbappé en el duelo contra la selección neerlandesa, tras entrenarse aparte este miércoles, con una férula pequeña en la zona dañada, sin máscara, con carrera e incluso con tiros a portería.
Nada intenso, nada de juego con contacto, aún para el capitán y figura de la selección dirigida por Didier Deschamps, con el que también conversó durante unos minutos sobre el terreno de juego.
Fue la primera sesión del atacante desde que se fracturó la nariz en la noche del pasado lunes, cuando se descartó una operación inmediata, aunque no futura, y se decidió su continuidad en la competición, en la que jugará con una máscara protectora.
Este miércoles, sobre el campo de entrenamiento en el estadio de la ciudad alemana de Paderborn, no lucía tal protección, apenas un discreto apósito y férula, nada voluminoso, tras el choque fortuito con el hombro del defensa de la selección austriaca Kevin Danso. La inercia de su remate de cabeza derivó en el golpe. Incluso, Mbappé lo rememoró aparentemente con sus gestos, cuando conversó con Deschamps, según se pudo ver durante la sesión.
Sonriente en varios momentos, con un trote ligero al margen inicialmente, cuando apareció sobre el campo media hora después que sus compañeros, y con golpeo de balón después, la incógnita sigue sobre sus opciones de jugar contra Países Bajos.
No descartado aún, ya sólo queda un entrenamiento más para el partido, este jueves a las 18.30 horas en el escenario del encuentro (a las 17.30 horas es la rueda de prensa de Didier Deschamps y un jugador).
El partido tiene un aspecto decisivo para resolver la clasificación matemática, pero también el liderato del grupo D frente a Países Bajos. El ganador obtendrá ambos beneficios este viernes en el Red Bull Arena de Leipzig.