Primicias24.com El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, afirmó este lunes que la pandemia de coronavirus y la invasión rusa de Ucrania han mostrado a la Unión Europea sus «vulnerabilidades», pero también el valor de «la unidad y la solidaridad».
«Hemos vivido grandes crisis que eran impensables los días antes de que se desencadenaran, covid-19 y la agresión ilegal en Ucrania, y estas dos crisis nos han mostrado muy claramente a los europeos cuáles son nuestras vulnerabilidades», comentó el político durante una conferencia celebrada en el Instituto Pierre Werner de Luxemburgo junto a sus homólogos de Francia, Catherine Colonna, y luxemburgués, Jean Asselborn.
La pandemia dejó ver que gran parte de la fabricación de medicamentos y material sanitario tenía lugar fuera de la UE, mientras que la invasión rusa de Ucrania puso de manifiesto la dependencia energética del club comunitario con respecto a Rusia.
No obstante, Albares destacó que esas dos crisis también han permitido «redescubrir» a los Veintisiete «el valor de la unidad y la solidaridad».
Comparó cómo se salió de la crisis financiera de 2008 y las soluciones aplicadas ante la pandemia y la guerra en Ucrania.
«Hemos descubierto o redescubierto que estando unidos y siendo solidarios salimos (de las crisis) antes, en mejor estado y dejamos a menos gente en los márgenes del camino», expresó.
El ministro recalcó que una de las prioridades de la presidencia española de la UE que comenzará el 1 de julio será «hacer frente a las consecuencias económicas y sociales que afrontan los ciudadanos europeos» por el conflicto bélico en Ucrania.
«Eso significa reindustrializar Europa. Europa no puede volver a estar como en febrero de 2022. Significa hacerla mucho más competitiva y, en primer lugar, completar la reforma del mercado eléctrico y energético», dijo, y añadió que la UE no puede exponerse de nuevo «al chantaje del gas, de la energía o de cualquier otro material fundamental para nuestra competitividad».
Insistió en que el club comunitario «no puede ser dependiente de un solo país» en cuestiones básicas como la alimentación, la energía y la salud, y que hace falta «un cierto grado de autonomía».
Afirmó que España va a asumir la presidencia en un momento «de cambio» en el que el orden europeo y mundial «se está rediseñando».
«Todo lo que afecta a la guerra de Ucrania (…) va a estar en el centro de la presidencia», apuntó.
Constató que en el actual contexto el club comunitario necesita aliados, para lo cual España «va a mirar» a Latinoamérica y el Caribe.
En ese sentido, recordó que el 17 y 18 de julio en Bruselas se celebrará una cumbre entre la UE y la CELAC.
También recordó que España organizará una cumbre entre los Veintisiete y los países mediterráneos del norte de África.
El jefe de la diplomacia española declaró que en un momento de cambios en el orden internacional Europa debe decidir «si quiere participar en ese rediseño, que su voz sea oída con fuerza en el mundo o, simplemente, seguir el terreno de juego diseñado por otros y las reglas de juego». Defendió que la UE participe y trabaje «con otros» en ese rediseño y asuma un rol de «moderador» en el mundo.
«No es la ambición de Europa ser simplemente un espectador», comentó.
Sobre el proceso de adhesión de Ucrania y Moldavia a la Unión Europea, Albares asumió que los Veintisiete deberán emitir «una señal fuerte» al respecto durante la presidencia española.
Resaltó que en Ucrania «todos los días» hay gente «que se levanta para ir a morir al frente por nuestros valores».
«Si no les damos un horizonte muy claro y muy fuerte sobre el futuro de Europa, ¿qué esperanza?», evidenció.
El ministro luxemburgués, Jean Asselborn, reconoció que no le parecería mal un cambio de presidente en Turquía en las próximas elecciones y recordó que el actual mandatario, Recep Tayyip Erdoğan, tenía unas posturas más proeuropeas entre 2004 y 2007. EFE