Primicias24.com El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, asistió este miércoles al funeral de varias de las víctimas del mortífero incendio que se produjo la noche del lunes en un hotel de la estación de esquí de Kartalkaya —una de las más importantes de Turquía—, situada en la provincia de Bolu.
El mandatario no contuvo el llanto y fue captado en cámara mientras se secaba las lágrimas.
«Nuestros corazones están ardiendo, nuestras almas están doloridas», dijo Erdogan, tras las oraciones fúnebres para ocho hermanos que perdieron la vida en el siniestro.
En la jornada anterior, el mandatario sostuvo una reunión con su Gabinete en la que decidió declarar un día de luto nacional. De acuerdo con medios locales, el incendio se pudo controlar tras 10 horas de trabajo, dejando 76 fallecidos y 51 heridos. Mientras tanto, nueve personas han sido detenidas en relación con el hecho, incluyendo al dueño del establecimiento.
Con información de RT