Primicias24.com – En entrevista exclusiva para Primicias24, el diputado a la Asamblea Nacional por el Movimiento Progresista de Venezuela (MPV) del bloque de la Unidad, José Luis Pirela, conversó con el editor Carlos Herrera y el periodista Sandor Rodríguez sobre los comicios presidenciales pautados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) para el venidero 22 de abril.
Al respecto, el parlamentario fue consultado sobre quién sería el candidato de la Mesa de la Unidad Democrática para dichos comicios, a lo que respondió:
«Hasta ahora no hay ningún candidato, hay varias opciones que los partidos han presentado. Existen varios nombre entre los que destacan Henri Falcón, está Claudio Fermín promoviéndose, han mencionado a varios pero evidentemente no ha habido una decisión todavía en relación con el tema de la candidatura». A su juicio, el debate de la oposición debe ser organizado, ya que existe mucho desorden e informalidad en el debate. Cree que es necesario que se lleve a cabo una agenda sobre el tema.
Ante esta situación, Pirela mencionó que: «ayer propuse la creación de un Frente de Emergencia Democrática para suplir el vacío de dirección política unitaria que tiene los sectores democráticos del país. La oposición lo primero que debe hacer es recuperar la dirección política unitaria, que no está funcionando y no existe. Lo más apropiado es que esa dirección política unitaria a través del Frente de Emergencia Democrática se haga con la participación de los partidos políticos así como también con la presencia de sectores de la iglesia, empresariales, sociales y sindicales que puedan recoger toda la policromía del país y garantizar un debate que defina si vamos o no a participar en las elecciones».
El dirigente del MPV dijo que esa es la mayor preocupación, y la gran pregunta de los venezolanos es «¿qué vamos a hacer? Un diálogo que no funcionó y no expresó resultados. Yo realmente no me hice grandes esperanzas en ese proceso porque el gobierno tiene su formato y estrategia, y la misma no es otra cosa que el control político por medio del caos que tienen los ciudadanos ocupados a los ciudadanos en las colas y la oposición no ha construido una estrategia que saque al Gobierno de su zona de confort y lo coloque de verdad en una negociación que pueda generar unas condiciones electorales igualitarias, que permitan confianza y promuevan la participación».
Consideró que existe una profunda desconfianza alrededor de esa elección que hace que no haya un criterio unánime. Destacó que hay sectores diciendo que debe participarse mientras otros llaman a la no participación en unas elecciones que se van a convertir en una emboscada. PRecisó que «es muy malo para el Gobierno que vaya solos con Nicolás Maduro a la reelección o vayan a poner a un mamotreto para justificar o darle un rostro de legitimidad a una elección que no es tal. Yo creo que sin unas elecciones creíbles el país puede entrar en una etapa de inestabilidad política peligrosa.
¿Si la MUD no participa en las elecciones que puede pasar en el país?
«Yo creo que el problema más allá de la MUD, hay sectores de oposición que en unas condiciones de una elección el 22, sin observadores internacionales, con el mismo CNE y con las mismas condiciones no les genera confianza ni credibilidad en el proceso, por lo cual el debate de participar o no esta presente», dijo Pirela.
Insistió que «si no hay una revisión de eso, ese debate se mantendrá hasta el final». Indicó que la oposición debe «construir y refundar la dirección política unitaria para que se tome una decisión unitaria, que va más allá de la MUD. Recalcó que debe incorporarse a los sectores sociales e incluso a la iglesia católica y evangélica a participar en dicho debate. «Lo que estamos no es de una elección parcial ni es cualquier elección sino una que tiene que ver con el presente y futuro de esta nación».
¿Cuál es su opinión con relación a las sanciones emitidas por los Estados Unidos contra Venezuela?
El parlamentario aclaró que «las sanciones individuales a funcionarios no tienen porqué comprometer a todo el país ni tiene que ser vistas como unas sanciones contra el país, son sanciones contra personas. Ahora, si el país se reestablece en las condiciones democráticas, en procesos electorales confiables obviamente ese tipo de relación podría cambiar pero el Gobierno ha sido demasiado torpe en ese manejo».
«¿Que sentido tiene realizar un proceso electoral que no sea confiable para nadie? ningún sentido, porque la elección no tiene ninguna legitimidad ni tampoco va a tener participación», apuntó. Aseveró que la oposición tiene el reto de debatir y decidir si va a participar en qué condiciones, y si no va a participar que roll va a jugar.
«Nosotros cuestionamos la elección de la Asamblea Nacional Constituyente porque el pueblo no fue consultado, pero después cuando el CNE dijo que obtuvieron ocho millones de votos todo el mundo se molestó, pero nadie supervisó el proceso. De manera empírica todos sabemos que huba una baja participación, los resultados fueron inflados y alterados. La oposición debe definir un roll que le permita -participando o no- tener un seguimiento completo del proceso electoral presidencial», expresó.
¿Usted estuvo de acuerdo con las guarimbas?
El dirigente del Movimiento Progresista de Venezuela aseguró que no participó en las guarimbas y para ello tiene testigo de excepción, sin embargo, ratificó que no cree en ninguna forma de protesta que signifique desmovilizar a la población.
Consideró que «las guarimbas fueron un error como método y como práctica. Como método porque trancar todas las calles desmoviliza a la población encerrando a las personas en sus casas; yo no conozca un proceso en la historia de la humanidad donde la protesta concluya encerrando a los ciudadanos en su casa y desmovilizándolos. Toda protesta debe tener fragor y calor popular que implica movilizarse». No obstante, subrayó que no produjo buenos resultados catalogándolo como un error.
Finalmente, Pirela afirmó que «los dirigentes políticos no podemos ser unos acomodaticios, que siempre andemos buscando aplausos por nuestras posiciones. Nos corresponde la responsabilidad de orientar a la sociedad, y a veces la orientación que damos no es simpática ni genera aplausos pero si es seria, apegada a la verdad y tiene la profundidad de leer correctamente y asertivamente la coyuntura, el tiempo y los hechos te dan la razón.