Califican como “detención ilegal” la privación de libertad del barranquillero en Cabo Verde
Primicias24- Baltasar Garzón, exjuez español conocido mundialmente por sus vinculaciones con líderes de izquierda regional y líder de la defensa de Alex Saab, empresario colombiano acusado de ser testaferro del presidente venezolano Nicolás Maduro, aseguró que lo más importante del caso es el “tema de los derechos humanos”.
“No debería, pero eso es aparentemente lo que está pasando. Hacemos un llamado al Poder Judicial caboverdiano para que profundice este caso, para abordar ampliamente los temas de derechos humanos y legalidad internacional que están en juego”, sostuvo Garzón en una entrevista con la agencia de noticias Lusa.
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El Gobierno de Estados Unidos acusa al barranquillero de lavar 350 millones de dólares para pagar actos de corrupción que se le atribuyen al Gobierno de Venezuela, mediante el sistema financiero norteamericano.
“En el caso de la extradición del enviado especial de Venezuela, Alex Nain Saab, desde 2018, esa orden no existía y se fabricó ‘a posteriori’, es decir, tras su detención arbitraria en Cabo Verde. Estamos, pues, ante un caso claro de detención ilegal”, señaló el abogado.
Agregó, además, que la ilegalidad de su detención no queda ahí, con una “detención arbitraria”, debido a que el enviado especial de Venezuela no pudo ser detenido por las autoridades de Cabo Verde porque el derecho internacional exige el respeto de su inviolabilidad diplomática.
Para Garzón esta situación no es de poca importancia porque afecta la soberanía y el principio de igualdad de los Estados, establecido en el artículo 2.1 de la Carta de las Naciones Unidas y en la Convención de 1969. Reiterando que su condición de enviado especial aparece en la documentación que le fue confiscada y escondida por la policía judicial al momento de su detención.
“El argumento del Tribunal Supremo que la escala de su avión no ha sido comunicada a las autoridades competentes caboverdianas es una afirmación seria, porque el plan de vuelo no incluía Cabo Verde, pero el avión fue desviado después de que se le negó el aterrizaje en Argelia y Marruecos”, apuntó.
Ante esta situación el defensor Saab declaró que no se respeta el derecho a su defensa y que viola los principios contemplados en el pacto internacional de derechos civiles y políticos, así como las normas más elementales y obligatorias.
“Es intolerable que un integrante del equipo internacional de abogados haya sido deportado dos veces y que no se permita ingresar a prisión a nadie y que la defensa local solo tenga derecho a 25 minutos de reunión. Esto viola todos los derechos humanos”, enfatizó.
Actualmente el caso está siendo procesado por la Corte Suprema de Cabo Verde, tras la apelación de la defensa a la sentencia de la Corte de Apelaciones de Barlavento, en la isla de São Vicente, que decidió proceder con la extradición solicitada formalmente por el Gobierno norteamericano. Pero “si la Corte Suprema no da razón a Saab, se interpondrá un recurso ante la Corte Constitucional”, puntualizó Garzón.