En algunos casos, desaparecen de forma gradual por sí solos, pero en otros persisten o se vuelven dolorosos y es necesario consultar al dermatólogo o podólogo
Primicias24.com- Los callos son protuberancias duras y engrosadas que aparecen mayormente en la piel de los pies a causa de la constante fricción con el calzado u otros elementos. Aunque también, pueden salir en las manos o puntas de los dedos.
En algunos casos, desaparecen de forma gradual por sí solos, pero en otros persisten o se vuelven dolorosos y es necesario consultar al dermatólogo o podólogo.
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Sin embargo en las situaciones más leves, se pueden mejorar con las siguientes técnicas naturales:
- Aspirina y limón. Con la combinación de ambos, se forma una pasta que se aplica sobre la zona afectada que ablanda el callo y luego se puede retirar de forma más sencilla con una piedra pómez. Para prepararlo, tritura 7 pastillas en el zumo de un limón.
- Cebolla. Pícala por la mitad, frota la parte afectada antes de dormir y luego cúbrela con una media. Al día siguiente enjuaga bien. Repite por lo menos durante una semana. Sí eres de piel sensible, no lo hagas.
- Té de manzanilla, prepáralo y cuando esté a temperatura ambiente, échalo en un recipiente y sumerge los pies para quitar los callos fácilmente.
- Tomate, haz una pasta y agrégala sobre lo callos, cubre la zona con una tela durante toda la noche y retira al día siguiente. Repite durante una semana.