Primicias24.com- El modo de gestionar Twitter de Elon Musk es un «desastre para el derecho a la información» y la decisión de bloquear varias cuentas de periodistas prueba el riesgo que el manejo «arbitrario» de las grandes plataformas de internet supone para la democracia, denunció hoy Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Esta organización sostuvo que «Elon Musk ha demostrado al mundo entero en el espacio de unas pocas semanas que su gestión de Twitter es un desastre para el derecho a la información», según un comunicado.
«La decisión de Twitter de prohibir las cuentas de varios periodistas prueba que la manera arbitraria de liderar las plataformas en línea supone una gran amenaza para la democracia», agrega el texto, que pide la inmediata restitución de los perfiles restringidos.
Para el secretario general de RSF, Christophe Deloire, lo que está ocurriendo con la red social es una «pesadilla kafkiana», por lo que es necesario «recuperar un control democrático» sobre este tipo de plataformas, «antes de que subyuguen completamente a las democracias a sus caprichos».
La organización de defensa de la libertad de prensa apuntó, además, que las cuentas bloqueadas correspondían a periodistas que no habían compartido la ubicación en tiempo real del multimillonario de origen sudafricano -la razón alegada por Musk para justificar las suspensiones de los perfiles-, sino que informaban precisamente de esa nueva política.
RSF criticó también que Musk se haya «burlado cínicamente» de estas suspensiones haciendo una encuesta entre sus seguidores preguntando cuándo se deberían levantar los bloqueos.
«Censurar periodistas y crear nuevas reglas para acomodar los caprichos del jefe no son estandartes de un espacio informativo digital sano. Es hora de que a los jefes de las grandes plataformas se les pongan los pies en la tierra mediante las leyes, y que finalmente pongan las plataformas al servicio de la información y la democracia», reclama el comunicado.
Para Reporteros Sin Fronteras, a las sociedades democráticas se les acaba el tiempo para responder a algo que es una «verdadera amenaza», por lo que pide a los Gobiernos tener en cuenta iniciativas y recomendaciones que ya existen a nivel internacional para preservar el derecho a la información en democracia.