Primicias24.com (Opinión)-Los últimos resultados electorales ocurridos durante este año 2018 el cual está culminando demuestran que el Chavismo es: Un proceso cultural, social y simbólico que ha logrado permear y arropar a casi toda la sociedad venezolana, las consecuentes victorias electorales son además de triunfos políticos victorias iconográficas y simbólica.
Para el periodista, historiador y especialista en mercadeo y comunicación política Javier Rovira, el Chavismo supo interpretar al país logrando crear, diseñar,estructurar y conectarse con el nuevo sujeto social e histórico a través de la propuesta y la praxis del novedoso modelo de inclusión social populista implantada curiosamente por un oficial de las fuerzas armadas a partir del año 2002. Proceso que transitó desde lo individual del líder carismático mesiánico Hugo Chávez al MVR 200 pasando al Socialismo del SXXI luego al PSUV y de allí al Plan de la Patria.
EL PSUV es el instrumento que estructura orgánicamente al chavismo, este tiene y posee una importante maquinaria física e institucional para la consecución del logro de sus objetivos electorales, y se ha convertido en una fuerza consolidada que va más allá de la función de gobernar y gerenciar al estado, hoy día podemos decir que acobija a todas las estructuras e instituciones del estado (F.F.A.A, ANC, gobernaciones, alcaldías, TSJ, ministerios e institutos), la clave es que es una fuerza social, cultural y simbólica casi religiosa entiende y comprende lo sincrético del venezolano.
El discurso o manejo del lenguaje utilizado por el chavismo como categoría posmoderna en la novedosa presentación de las dinámica, de las formas políticas de crear y construir socialidad es quizás el mayor de sus aciertos al lograr diferenciar y posteriormente para poder agrupar a los individuos de las personas, dice Maffesoli “la sociedad esta hecha por individuos, la socialidad de personas, los individuos generan identidad y las personas al identificarse con un rol se representan, el individuo se encierra en su identidad y se agota en su función social, a diferencia, la persona se identifica con sus simultáneos sin agotarse” eso se denomina reconocimiento. El chavismo es una comunidad emocional o tribu emocional enmarcada en una sólida identidad social que generó y desencadenó una nueva cultura política.
Para Javier Rovira, los venezolanos están agotados de la polarización y la confrontación, la prioridad es el problema económico, los connacionales esperan que se lleve la dinámica política y económica a otro nivel de debate y de diatriba con posiciones cívicas y con principios ciudadanos, estamos seguros y los estudios de opinión así lo revelan que hay consenso real del país nacional y del país político en repensar, redefinir y reconstruir al país como lo hizo en su momento el comandante Hugo Chávez y Rómulo Betancourt, existe una necesidad y demanda de unidad y de conciliación nacional, respuestas y soluciones ya.
El historiador y especialista en Mercadeo Político, concluyó que la oposición lamentablemente no existe en Venezuela, ese rol en la actualidad lo hace el gobierno Madurista/Chavista y precisó que: “Los que no están en el chavismo no son parte de la oposición”. Maffesoli nos explica en términos de una muy avanzada sociología que la política hecha desde la perspectiva chavista o revolucionaria es mas hacía la persona, mientras que la política hecha por la oposición va direccionada hacía el individuo, de allí se podría desprender la discusión o la interrogante ¿será esta la razón de tanta división en la oposición venezolana?.
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