Primicias24.com- Estudios en la nutrición se encuentra en constante evolución, numerosas investigaciones han comprobado que existen varios alimentos que antes eran catalogados como “malos” para la salud, y luego se ha comprobado que es falso.
Como por ejemplo el huevo que en algún se pensaba que eran malos para el colesterol, y tras investigaciones realizadas por expertos se descubrió que es una de los alimentos más saludable y ahora se recomienda para incorporarlo a las dietas.
Pero en este caso hablaremos de alimentos que fueron considerados buenos y ahora no.
El jugo de Frutas
Según Antonio R. Estrada, creador de Sinazucar.org, el azúcar del jugo es absorbido de una forma asombrosamente rápida por nuestro organismo al tratarse de azucares libres, que no se encuentran en la matriz de la fruta.
Estrada aseguró que “la fruta entera contiene una gran cantidad de fibra, un nutriente que no sólo favorece la lenta asimilación de la fructosa, que se encuentra intrínseca en ella, sino que consigue que el proceso de digestión sea mucho más lento”.
En un estudio reciente publicado en la revista médica The BMJ, compara el jugo con los refrescos azucarados, y revelaron que el consumo habitual de este tipo de bebidas aumentaría las posibilidades de sufrir cáncer.
El Yogur
Se trata de un alimento del que se decía que podía favorecer sobremanera nuestra salud intestinal, sino que además era un estupendo aliado para reducir el riesgo de padecer diabetes tipo 2.
Una investigación publicada en la revista BMJ Open, aseguró que no todos los yogures que consumimos no son tan saludables como pensamos ya que la gran mayoría sobrepasan ampliamente la cantidad de azúcar recomendada para un producto como éste.
Los únicos yogures que salen de ese grupo son los griegos, ya que posee una cantidad mucho menor de azúcar y un mayor contenido en grasas y proteínas.
Jamón de York
A pesar de su bajo contenido calórico, debería ser consumido de forma ocasional. En el mercado podemos encontrar tres tipos de jamón de York distintos: el jamón cocido extra (el de mayor calidad), el jamón cocido (a secas) y el fiambre. En este último caso, el porcentaje de carne ronda como mucho el 50% del producto, reseñó El Español.
Es poco recomendable, porque es una carne procesada, cuyo consumo aumenta el riesgo de sufrir cáncer, según advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2015.
