Primicias24.com- En Europa uno de cada cien nacimientos padece Trastornos del Espectro Autista (TEA), y según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 1,5 millones de familias tienen por lo menos un miembro con TEA.
Los especialistas sostienen que el diagnóstico precoz y una intervención temprana son de vital importancia para que las personas con autismo mejoren significativamente su calidad de vida.
Es así como se desarrolló el método ABA, o análisis conductual aplicado, que surgió en la década de los 60 como una ciencia para el estudio de los principios y limitaciones del aprendizaje.
“Después de realizar numerosos estudios, se pudo corroborar que ABA es uno de los métodos que tiene más evidencia de eficacia en el tratamiento del autismo”, asegura José Alberto Monseco, director de la academia Abascool de España.
El método ABA sostiene que todas las personas aprenden de la misma manera, por lo que puede ser aplicado a todo el mundo, no sólo a aquellos que tengan discapacidad. Además, prueba la relación que existe entre todas las variables del entorno y el sujeto y qué efectos tiene sobre su conducta.
“Lo primero que se hace es valorar las motivaciones de la persona, porque da igual cuáles sean tus capacidades, al final todos aprendemos porque algo nos motiva, nos compensa. Por eso es una terapia tan individualizada, porque a cada persona le motivan unas cosas”, sostiene Monseco.
ABA es una terapia integral e intensiva, por lo cual los especialistas califican de importante el papel de las familias y los centros educativos, para que los comportamientos que se trabajen en la terapia se trasladen a otros entornos y se generalicen.
Su ejecución se realiza desde un enfoque técnico y científico, en el que se registran todos los datos, “se analizan los datos para ver lo que funciona, y cambiar lo que no funciona. Porque para ABA todos podemos avanzar. Todo puede ser enseñado, pero necesitamos dar con la clave, con las estrategias adecuadas”, afirma José Alberto Monseco.
