A tres años de la operación, sus niveles de etanol en la sangre volvieron a la normalidad
Primicias24.com- De acuerdo a lo que señala la revista Annals of Internal Medicine, un hombre en bélgica sufría de una extraña y poco común enfermedad conocida como síndrome de la autocervecería o síndrome de fermentación del intestino, que fue tratado de manera exitosa por un transplante fecal.
El síndrome de la autocervecería o síndrome de fermentación del intestino hace que la persona que lo padece, sienta como si estuviera totalmente ebrio, incluso sin haber ingerido una gota de alcohol.
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Con 47 años, el paciente, que no fue identificado, decía sentirse ebrio de forma intermitente durante los dos meses anteriores a su visita al hospital, a pesar de no consumir alcohol.
Según dio a conocer, esta condición comenzó a manifestarse luego de tomar antibióticos.
El síndrome suele ser causado por microorganismos en el intestino, generalmente hongos, que se alimentan de hidratos de carbono ingeridos de forma reciente para producir su propia infusión de alcohol.
Se encuentran presentes en la mayoría de las personas, en pequeñas cantidades y pueden llegar a crecer sin control en los organismos de quienes padecen esta condición.
A veces suele manifestarse tras la toma de antibióticos que desequilibran el intestino y los posibles tratamientos pueden incluir una dieta alta en proteínas y baja en hidratos de carbono.
De acuerdo a lo expresado por el paciente, este se sometió a una serie de pruebas que descartaron otras posibles afecciones, lo que llevó a que los médicos diagnosticaran que se trataba del mencionado síndrome de fermentación intestinal,
Tras recetarle una dieta baja en hidratos de carbono y medicamentos antimicóticos, todavía se sentía borracho luego de ingerir determinados alimentos, lo que llevó a que se sometiera a un transplante fecal.
En este procedimiento, las heces de una persona sana se transfieren al tracto gastrointestinal de un paciente cuyas bacterias intestinales necesitan reequilibrarse.
Fue su hija, de 22 años, quien aceptó ser la donante y después de haberse sometido al remedio, los síntomas de embriaguez desaparecieron y a casi tres años del transplante, el hombre sigue libre de síntomas y sus niveles de etanol en la sangre volvieron a la normalidad.