Primicias24.com- El 9 de abril de 1999 fue asesinado el presidente de Níger, Ibrahim Baré Maïnassara, tras un golpe de Estado que impulsado por el ejército de su país.
Aunque aún hay muchas dudas sobre su muerte, medios locales señalaron en ese entonces que el mandatario se preparaba para tomar un helicóptero en el aeropuerto de Niamey, debido a que este intentaba huir de la nación.
En principio, su muerte fue oficialmente descrita como un “infortunado accidente”, pero esta explicación fue considerada luego como inverosímil.
Quien lo sustituyó en el cargo fue el mismo líder del golpe de Estado, Daouda Malam Wanké, quien inició una transición política que finalizó con la realización de elecciones a fines de ese mismo año.
La Constitución de ese mismo año otorgó amnistía tanto para los participantes en el golpe de 1996 como en el de 1999 y meses mas tarde del hecho, inició una investigación sobre la muerte de Maïnassara, sin embargo, al decretarse la amnistía, fue concluida en septiembre.
Detalles del acontecimiento
El 9 de abril de 1999, Níger estaba totalmente aislada del mundo, debido a que todas las comunicaciones quedaron interrumpidas desde media mañana y la radio nacional dejó sus emisiones.
Además, el aeropuerto de Niamey quedó cerrado y los aviones que debían aterrizar en la mañana fueron desviados hacia los países vecinos.
Tal como lo reportó Radio Francia Internacional (RFI) y testigos, fueron desplegados numerosos carros blindados en las calles y ante los edificios oficiales de Niamey.
Desde tempranas horas la guardia presidencial acordonó el sector de la presidencia de la república, la residencia del jefe del Estado, así como los sectores de los ministerios del Interior y de la Defensa, así como la zona del aeropuerto de Niamey.
El gobierno de Baré Maïnassara llamó a la calma, después de que la oposición lanzase un llamamiento para protestar contra la anulación de los resultados de las elecciones locales.
Llegada a la presidencia
Bajo su Gobierno, se aprobó una nueva Constitución por referéndum en mayo de 1996, y se celebraron elecciones presidenciales el 7 y 8 de julio de 1996.
Maïnassara obtuvo el 52% de los votos, pero la elección fue ampliamente considerada como fraudulenta. En el segundo día de los comicios, disolvió la comisión electoral y la reemplazó por otra; ese mismo día, también colocó a los cuatro candidatos opositores bajo arresto domiciliario, en el que permanecieron durante dos semanas.
Maïnassara asumió su cargo como Presidente el 7 de agosto.