Primicias24.com- El Museo del Hermitage de San Petersburgo, una de las mayores galerías del mundo, fue inaugurado el 5 de febrero de 1852, en Rusia.
Cinco espectaculares construcciones situadas a la orilla del río Neva, componen el complejo que abriga la enorme colección del museo: el Palacio de Invierno; el Teatro de Hermitage; el Hermitage Pequeño; el Hermitage Viejo y el Nuevo Hermitage, que forman un hermoso conjunto arquitectónico.
El edificio más importante de toda la composición, es el Palacio de Invierno, por haber sido la residencia oficial de los antiguos emperadores.
La exhibición está compuesta por la colección privada adquirida por los zares durante varios siglos. En 1917 fue declarado Museo Estatal.
Algunos historiadores sostienen que el museo nació oficialmente en 1764, cuando un comerciante berlinés envió 225 cuadros a Catalina II, para pagarle algunas deudas.
Al recibirlos, Catalina quiso que su galería no fuera superada por las colecciones de otros monarcas y comenzó a comprar casi todo lo que se vendía en subastas europeas.
Las salas más significativas
Quien recorra el histórico espacio, con un paseo guiado, puede adentrarse e incluso entender algunos acontecimientos de Rusia. La influencia de los valores imperiales está presente constantemente, en su decoración. En la sala de Pedro I puede contemplarse el retrato del emperador con la diosa de la sabiduría que le guía hacia nuevas hazañas, además de escenas del triunfo de las tropas de Pedro I, en la guerra contra los suecos.
La sala de los Blasones, está presidida por columnas doradas de orden corintio. El emperador recibía allí a los mensajeros procedentes de otras regiones. La sala tiene una superficie de mil metros cuadrados. En ella está el águila bicéfala, que es el escudo de Rusia, y los escudos de cada una de las provincias rusas.
San Petersburgo y el Hermitage, conforman, sin duda, un destino imprescindible para los amantes del arte y la cultura.
