Primicias24.com- El Pacto de Neutralidad Soviético, entre la Unión de Repúblicas Socialista Soviéticas (URSS), y el imperio japonés, fue firmado el 13 de abril de 1941. Se trató de un tratado de paz que puso fin a la guerra no declarada entre Japón y la Unión Soviética, que había comenzado años atrás.
Tal formalidad, fue un avance que permitió a ambas naciones liberar grandes cantidades de tropas y recursos en los territorios disputados de Manchuria y Mongolia Exterior, para ser utilizados en zonas que representaban mayor urgencia.
El acuerdo fue oficializado, dos años después de que la Unión Soviética firmara un acuerdo similar con Alemania, que posteriormente dividió a gran parte de Europa Oriental entre los dos países.
El Pacto de No Agresión Molotov-Ribbentrop, permitió que Alemania mover las fuerzas de la Wehrmacht hacia el oeste, para organizar sus grandes ofensivas de 1939 a 1941, lo que le dio tiempo a la URSS de prepararse para el conflicto que se avecinaba.
Acuerdos no respetados
A pesar de las políticas que implicaron la firma de aquel acuerdo, tan sólo dos meses después, el 22 de junio de 1941, Alemania lanzó la operación Barbarossa, con la que invadió a la URSS. Stalin fue tomado por sorpresa, aunque fue advertido por los servicios de inteligencia, y la Wehrmacht alemana penetró rápidamente en la Unión Soviética, hasta llegar a las afueras de Moscú. El Ejército Rojo no tuvo tiempo de realizar una contraofensiva exitosa.
Japón se vio obligado a concentrar todas sus fuerzas en la resistencia contra la contraofensiva masiva de Estados Unidos (EE.UU), en el Pacífico, en 1942.
El 8 de agosto de 1945, tras lo acordado, la Unión Soviética declaró la guerra contra Japón, y al día siguiente el Ejército Rojo invadió Manchuria y Corea. El mismo día, Estados Unidos lanzó su segunda bomba atómica sobre Japón, con lo que destruyó a la ciudad de Nagasaki, como lo había hecho con Hiroshima tres días antes.
