Conocido por ser el presidente de Perú
Primicias24.com.- El 28 de julio de 1938, nació en Lima, Perú, el político e ingeniero agrónomo Alberto Fujimori, quien tiene ascendencia japonesa gracias a sus padres que emigraron a ese país en 1934.
Fujimori, es conocido por ser electo como presidente en los comicios generales de esa nación en 1990, con el 60% de los votos, debido a que su programa estaba basado en el desarrollo económico y en la mejora de las condiciones de vida de los campesinos.
Victoria con la que derrotó al escritor Mario Vagas Llosa, y con la que, además, pudo superar la resistencia de la oposición para poder cumplir los términos establecidos por el Fondo Monetario Internacional, con el fin de habilitar al Perú para la concesión de créditos, y estableció relaciones con Japón, con la esperanza de conseguir préstamos de dicho país.
Lo que le permitió una estabilización económica hizo disminuir la tasa de inflación, pero no logró mejorar la debilitada economía peruana.
Por lo que 1992, disolvió el Congreso, anuló algunos puntos de la Constitución y detuvo a sus rivales políticos, argumentando que todas estas medidas estaban destinadas a combatir al grupo Sendero Luminoso y a los narcotraficantes.
Para septiembre de ese año, el líder de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán Reynoso, fue capturado, juzgado y condenado a cadena perpetua.
Acciones que llevaron a que se llevará a cabo un golpe de Estados el 13 de noviembre, el cual fue frustrado, y el 22 de noviembre, se eligió un nuevo Congreso.
Pero eso no fue impedimento para que Fujimori fuera reelecto en 1995, ya que el partido mayoritario, conocido como Nueva Mayoría-Cambio 90, conservó en el poder al político, tras haber conseguido una reforma constitucional que le permitía repetir mandato.
Aunque eso no fue impedimento para una nueva crisis, ya que a finales de 1996, un comando del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) asaltó la Embajada japonesa en Lima reteniendo a una gran cantidad de rehenes para solicitar a cambio de su liberación la de los presos pertenecientes a la organización.
Al año siguiente, reanudaron las negociaciones entre el gobierno y el MRTA (que entonces todavía retenía a 72 personas), rotas desde el 28 de diciembre, y el 2 y el 3 de marzo viajó a la República Dominicana y Cuba para intentar negociar el exilio de los asaltantes del MRTA.
Finalmente, el 22 de abril, tropas del Ejército peruano dirigidas personalmente por el propio Fujimori, tomaron por asalto la Embajada, acabando con la vida de los 14 miembros del MRTA y liberando a 71 de los 72 secuestrados.
Para noviembre del 2000, dimitió de su cargo durante un viaje a Japón. El 13 de febrero de 2001 la Fiscalía de la Nación lo acusó formalmente de enriquecimiento ilícito y malversación de fondos públicos. Y en el 2004 Transparency International estimó en unos 600 millones de dólares la fortuna amasada “ilegalmente” por Fujimori durante sus 10 años en el poder.
Tanto ellos como otras situaciones hicieron que Fujimori se viera enredado con la justicia desde el 10 de enero de 2006, cuando el Jurado Nacional de Elecciones rechazó oficialmente la candidatura del ex Presidente Alberto Fujimori -que estaba detenido en Chile y con un pedido de extradición- a las elecciones presidenciales del 9 de abril, de acuerdo con un decreto del organismo.
La decisión, que declara “improcedente” su inscripción, fue adoptada “por encontrarse sujeto a inhabilitación especial el ciudadano Alberto Fujimori, propuesto como candidato a la presidencia de la República por la Agrupación Independiente Sí Cumple”. Fue acusado de abandono de cargo y luego de ser destituido en medio del mayor escándalo de corrupción en este país.
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Por lo que fue condenado a 25 años de cárcel de prisión por su responsabilidad en los delitos de asesinato con alevosía, secuestro agravado y lesiones graves en las matanzas de Barrios Altos, en 1991, y La Cantuta, en 1992, causadas por un escuadrón del ejército conocido como el grupo Colina, y por el secuestro de un empresario y un periodista.
Para el 2009, fue condenado a otros siete años y medio de cárcel por peculado doloso, apropiación de fondos públicos y falsedad ideológica en agravio del estado. El 2 de enero de 2010, se confirma la sentencia a 25 años de prisión por violaciones de los derechos humanos.
Seis años después, el Tribunal Constitucional del Perú rechazó la nulidad de la condena de Alberto Fujimori. Pero en diciembre de 2017 recibió el indulto humanitario, cuando permanecía en una unidad de cuidados intensivos. El 20 de febrero de 2018 la Sala Penal Nacional resolvió no aplicar la resolución que otorgaba el derecho de gracia por razones humanitarias a Fujimori.
